Anudaste el silencio en tu pelo,
hermosa inocencia.
Teñiste de gris plata el cálido gesto
postrado en tu mejilla,
esperando, una vez más,
que la vida te rozara
los párpados,
las manos,
las penas.
Si el tiempo pudiera agarrarse a tu falda,
ella se quedaría a tu lado.
Photo by Henri Cartier Bresson
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada